jueves, 19 de marzo de 2015

A DONDE VAMOS A PARAR?

En los últimos meses hemos visto como los productos de primera necesidad han ido desapareciendo unos o escaseando otros, entre estos:  alimentos, medicinas e insumos médicos, artículos del aseo, línea blanca y marrón, repuestos automotrices, eléctricos y electrónicos, etc. etc. etc.

En mi diario contacto  con familiares, vecinos, amigos y desconocidos en la calle,  el tema obligado se refiere a: “No encuentro café; no hay leche; no hay jabón de lavar; no encuentro Euthirox, Diprospan, Benutrex, Acetominofen; etc. etc. etc.”. Ante esta conversación, siempre les digo: “Que a mí, además de todo eso me preocupa  la falta de medicamentos e insumos médicos”; Claro, esto lo digo con propiedad porque llevo varios años trabajando en ese medio, suministrando básicamente al Sector Salud material médico descartable.

En nuestro querido país existían grandes empresas que producían y/o importaban insumos médicos de excelente calidad, la mayoría de ellas se fueron del país en los últimos diez años; ya son contadísimas  las que continúan operando, pero su producción es mínima por la falta de materia prima. La deuda del Estado con las multinacionales relacionadas con este ramo es inmensa. La situación económica que estamos viviendo es por demás complicada, abrimos el año 2015 con una inflación de un 64 %, y ha ido en aumento, etc. Todo esto hace que este rubro, específicamente, se haya convertido en un mal crónico que se  agudiza y que parece que ya  llega a su “fase terminal”

Según la Asociación Venezolana de Clínicas y Hospitales (AVCH), la escasez de insumos hospitalarios alcanza  80 %, esto refiriéndose a lo que normalmente se utiliza en el día a día, y ponen como ejemplo la reutilización de los Marcapasos cardíacos de pacientes fallecidos.

Esta semana fui con una inmensa lista  de requerimientos de material médico descartable a una de las grandes empresas comercializadoras de insumos médicos, que haciendo un esfuerzo grande de resistencia, aun están vendiendo este tipo de material y en conversación con sus dueños me dijeron; …“lo poco que tenemos es lo que nos llegó para este año, no sabemos que haremos al terminarse…” Fui a tres empresas más y la repuesta fue la misma.

Les podría hacer una lista de más de cien productos que no se consiguen y que son básicos para la prestación de una asistencia aceptable de salud, por ejemplo:

- Adhesivo MICROPORE
- Adhesivo DURAPORE
- Catéter Intravenoso JELCO
- Campo Quirúrgicao IOBAN
- Inyectadoras de 3, 5, 10 y 20 cc.
- Gasas en rollo
- Clip para ligadura
- Marcapasos Cardíaco
- Macrogoteros
- Papel para video printer (Eco)
- Suturas de todo tipo; etc. etc. etc.

Las personas que están haciendo  “su Agosto”; son los que venden estos productos por el famoso Mercado Libre; por ejemplo:
- El caso de la Sutura marca Ethicon, que la traen por los “caminos verdes”
- Un Catéter Intravenoso Jelco, cuyo precio normal (actual), es de Bs. 3,50 y lo están vendiendo   en Bs, 300,00 c/u..
- Una Compresa de Laparatomía estéril 18 x 18, su precio es de Bs. 5,08 y la llegan a vender en Bs. 271,00
- Una Caja x 100 Guantes descartables, Bs. 68.96 y lo venden en Bs. 600,00 y más; y pare de contar.

En este sentido me pregunto, aunque sé la repuesta:
- Estos productos vendidos, bajo esa modalidad (Mercado libre), tienen Permiso Sanitario?
- Cuáles son las condiciones de asepsia quirúrgica de esos productos?
- Si un paciente, luego de una intervención quirúrgica se contamina por la Sutura (de dudoso origen), que pasaría?
- Qué le pasaría a una Clínica Privada, si en una inspección de las autoridades de Salud, le encuentran esos productos, sin el correspondiente Permiso Sanitario?
- Qué hacen las instituciones hospitalarias ante esta disyuntiva:  utilizo estos productos o dejo que un paciente se muera de mengua?

Señores estamos ante una crisis sanitaria de magnitudes incalculables, provocada por la escasez de insumos y medicamentos, mientras el Estado no hace nada por  garantizar la dotación mínima de productos para atender la salud del pueblo venezolano.

Por último, sólo me queda imaginar la angustia de un ciudadano de nuestro país a quien que se le presenta una emergencia cardíaca y la salvación de su vida depende de la colocación un Marcapasos Cardíaco?????????

Las fallas son tan numerosas que la vida de un ser humano está colgando de un hilo  quedándole sólo encomendarse a Dios.

                                                                                              Caracas, 19 de Marzo del 2015