SORPRESAS QUE ME LLEVADO CON MI MUSICA
Cambiando un poco la
temática de mis escritos, en esta oportunidad hablaré de la Música, de Mi
Música.
Se dice que la
palabra Melómano viene de un vocablo griego, en el cual el prefijo “melos”
(canto) y el sufijo “manos” (manía); de donde se puede inferir que la
“melomanía” es una verdadera locura por la música y tomo un concepto de
Melómano, de Julián Pérez Porto y Ana Gardey, quienes en su página “Definición
de”, escriben que: “Melómano es el sujeto
fanático de la música. Se trata de una persona que siente un amor apasionado y,
según el punto de vista, excesivo por lo musical, dedicando tiempo y dinero al
disfrute de este arte”
Las personas que me
conocen saben de mi pasión por la “música buena” como la defino y a la cual le
dedico gran parte de mi tiempo libre. En mi pc, actualmente tengo más de veinte
mil temas musicales, ordenados en carpetas de acuerdo con el país origen de los
interpretes; y dentro de estas carpetas van otras carpetas por cada interprete,
donde se incluyen sus temas , la biografía y la foto del cantante. Cada una de
esas canciones las he “arreglado”, o sea las he pasado por el “Programa de
audición avanzada para Window Cool Edit Pro 2.0”, el cual dispone de una gran
variedad de herramientas para la edición de la música.
Lo que quiero
compartir con ustedes es parte de las buenas y bonitas sorpresas que me he llevado
en este proceso con mi música, bueno así lo creo yo:
De la Orquesta Billos
Caracas Boys, tengo sólo 930 de sus interpretaciones, éstas hechas por los
cuarenta y un cantantes masculinos que ha tenido esta destacada y afamada
agrupación venezolana; pero lo que me llamó la atención fue, que el maestro
Luis María Frómeta (Billos), quien nunca tuvo cantantes femeninas, grabara la canción “No si así es”, a mediados de los años 50 en un disco de
formato 78 rpm con la cantante cubana Candita Vásquez, a pesar de no pertenecer
a su orquesta; sin embargo, posteriormente le saca un long play (LP)
titulado Billo Presenta: Candita Vásquez, con doce temas musicales.
La ciudad de
Trujillo, capital de mi estado natal, se encuentra enclavada entre los
imponentes cerros Santa María y La Guaira. Me acuerdo de muchacho, cuando uno
visitaba esta ciudad que estas moles orográficas eran como una gran caja de
resonancia de alguien que con un equipo de sonido solo colocaba en las tardes,
las canciones: “Dos Pasajes” de Lupe y Polo (mexicanos) y “Ojitos verdes y El
puente Roto” de las Hermanas Calle. Yo
estaba convencido de que estas hermanas eran mexicanas. Solo después de ver la
novela colombiana basada en la vida esas hermanas y ahora leer sus biografías,
me entero que eran colombianas.
Oyendo: “Entre Copa y
Copa”; “A las Seis es la cita”; “Derrumbes”, etc., de Tito Cortés, lo
identificaba como cubano o puertorriqueño, sorpresa era colombiano.
Me entero así mismo
que “Los Indios Tabajaras” eran brasileros; Luis Miguel, el “Sol de México”, es
puertorriqueño y la famosa cantante de rancheras Chavela Vargas era de Costa
Rica.
Muchas veces vi en la
televisión española a Miguel Bosé cantando “Amante Bandido o Morir de Amor”,
juraba que era español, resulta que es panameño.
Quien no escucho a
Elvis Crespo cantando el merengue “Suavemente”, a Romeo Santos entonando una
bachata, o a Marco Antonio Muñiz (Marc Anthony) cantando una hermosa balada o
una salsa; creía que los dos primeros eran dominicanos y Anthony puertorriqueño,
pues resulta que todos son de Nueva York. Igual Héctor Lavoe era neoyorquino.
Me llamó la atención
ver y oír a Gilberto Santa Rosa interpretando “Enamórate bailando”, con el
Septeto Acarey, me dije estos músicos deben ser puertorriqueños o cubanos y no,
son peruanos.
Y así podría seguir
escribiendo hoja tras hoja con las sorpresitas que me he llevado con “la música
que me gusta”.
Caracas, 07 de Agosto
del 2019
MILTON R. ABREU A.
Coronel Ejército
Siglo XX
