SEÑORA PACHECO
“Lo escrito,
escrito está”; así le responde el gobernador romano de Judea y
responsable del suplicio y crucifixión de Jesús de Nazaret, Poncio Pilatos al
sumo sacerdote judío Caifás; cuando éste le pregunta sobre lo que aparecía escrito en
la tabla que se le colocó a la cruz; que decía: “Este es Jesús de Nazareno, Rey
de los Judíos”.
Anoche me llamó la
prima Moraima y me dice” …primo, estoy leyendo un libro y ahí nombran a un
Milton Abreu Arismendi, ¿eres tú? Supe que la semana pasada estuvo rondando por
las redes el Libro “Los hermanos siniestros” de la periodista Ibeyise
Pacheco y de verdad que lo pasé desapercibido. En vista de la información
recibida, de inmediato bajé, vía internet, el mencionado libro y efectivamente
mi nombre aparece en la página 111.
Es un libro, dijera
un amigo mío: “sabroso de leer”, donde se describe la historia de personajes de
estos tiempos, que aún muchos de ellos “con nombres ficticios, todos los
reconocen”. En mi caso, se ve que usted, señora periodista, tomó casi
textualmente lo publicado en la Revista Primicia N. 161 de fecha 23 de enero
del 2000 “La Fuerza Armada a la ofensiva” y el artículo “La CIA siguió los
pasos de alto funcionario de la Cancillería”, de la periodista Gioconda Soto,
publicada en El Nacional, el 03 de Febrero del 2001; pero en ambos
artículos se relatan medias verdades, y le voy a citar como ejemplo el
Señor Peter F. Romero, ex embajador de los Estados Unidos de Norteamérica en
Ecuador, ejerció este cargo diplomático en la república del Ecuador desde el
año 1993 hasta el 1996; y yo llegué a Quito, como Agregado de Defensa de la
República de Venezuela ante el Ecuador, a finales del mes de Agosto del año
1998.
Señora Ibeyise, no
conozco al señor Romero, ni trabajé con él, ni para él. Lo que se hizo
durante mi gestión de trabajo en ese hermoso y recordado país, quedó
plasmado en los respectivos informes propios del cargo. Las órdenes que
cumplí allí, fueron las emitidas por los respectivos órganos regulares
(Ministerio de la Defensa y Cancillería).
Como decía al
comienzo: “Lo escrito…”, vi necesario hacer esta aclaratoria y más que a
usted, se la hago a mi familia, a mis amigos y a la historia. Está demás
decirle que: “… cuando se habla de historia, hay que preguntarle a quien sabe
de historia … Así que” Mucha suerte con su libro, seguro va a tener muy buena
acogida entre los venezolanos de buena voluntad, que somos la inmensa mayoría
de los que acá vivimos.
PD. Ojalá hubiese
trabajado con ese funcionario, porque lo más seguro es que me hubiesen renovado
la Visa Americana
Puerto Ordaz, 02 de
junio del 2020
MILTON R, ABREU A
Coronel Ejército
Siglo XX