ESTA NO ES MI CULPA, SI ES SUYA, ESTA A TIEMPO PARA HACER SU “MEA CULPA”
Cuántas
veces usted vio o escuchó durante su carrera militar a: "...Generales que
bolas?”
Esta
pregunta se la formulo al personal del Ejército venezolano, que ejerció su
trabajo en el siglo XX, y vivió la experiencia de enterarse del ascenso al
grado de General o toparse con un Oficial General, que a su parecer le
quedaba grande ese grado, por lo cual, automáticamente se producía la
expresión, ya fuese para sus adentros o ante sus iguales: !Ese tipo es
General !!!! Que bolas....Por mi parte, debo reconocer, que afortunadamente,
para nuestra Institución y por ende para nuestro país, si los hubo, pero no
fueron la mayoría, "para esa época.…"
Mediante
una pequeña y sencilla encuesta vía Internet, hecha a Oficiales compañeros,
conocidos y a chats donde sus miembros son militares retirados. Le hice las
siguientes preguntas:
Compañero, estoy
haciendo una encuesta.
En la vida militar
utilizamos muchas expresiones que forman parte de la jerga nuestra.
1.- Oyó la
expresión: “General que bolas”
2.- De ser positiva
su respuesta, agradezco explicar, a su criterio, el significado de esa
expresión.
Gracias, agradecido
por su atención.
Saludos
De inmediato comenzó una lluvia de repuestas, cuestión que les agradezco a estos señores Oficiales al haberse tomado parte de su valioso tiempo para escribirme y que trataré de resumir más adelante. Me llamó la atención que ningún señor General me respondiera; por lo cual, quiero pensar que haya sido por sus múltiples ocupaciones y no por aquello que conceptualizó muy bien el sociólogo y filósofo francés, Emile Durkheim, cuando hablaba de la “solidaridad mecánica”.
En este sentido, les transcribo una
de las respuestas que me llamó particularmente la atención porque abundó en
detalles:
Yo fuí el protagonista de esa
historia... cualquier cuento es cuento... Estaba en RRPP del Ejército con el
grado de Mayor, y el Director me dio la lista de los Coroneles que iban a
ascender, para informarles que ya habían sido aprobados los ascensos. Esto, a
objeto que se presentaran el día del ascenso con las presillas. Comencé a
llamarlos y uno de ellos quien estaba de Jefe en una Circunscripción Militar en
el Oriente del país, le digo Ud. va ser ascendido a General y él me
contestó : Que bolas, YO??, deme su nombre, usted me está “mamando gallo”; no
me creía. A él lo había metido en la lista un alto personaje político de “La
casa de misia Jacinta”. Al yo contar este suceso en la Comandancia, esta se
regó como pólvora… y a este nuevo “soleado” le dieron el remoquete de:
“General, que bolas”.
La mayoría de
los encuestados coinciden en afirmar que estos “Generales…” eran: normalmente
tipos “grises”, que durante su carrera no destacaron por su actuación,
timoratos, evasivos a las responsabilidades, que no arriesgaron, que no
comandaron, y si lo hicieron, su gestión fue opaca; que el único monte
que vieron durante su carrera, fue en las jugosas ensaladas que se comieron;
que se “quemaron el pecho”, pero haciendo parrilla. Pero si supieron pegarse a
un buen padrino (político en la mayoría de los casos), que los llevó de la mano
durante toda su carrera. Ocuparon cargos relevantes en la cúpula militar
y hasta llegaron a ser ministros de la Defensa. Y algo más doloroso aún para la
institución, es que varios de ellos, introdujeron sin ningún tipo de
remordimiento, la política partidista en las filas de la organización.
Días
atrás un brillante Oficial (Retirado), de nuestro Ejército con el grado de
Coronel, nos impartió una charla sobre el Instituto de Previsión Social del as
FAN, donde demostró sobrados conocimientos técnicos-científicos en el tema
tratado y esto avalado por un extenso currículo profesional y además la
suficiente experiencia sobre el manejo de esa Institución, que me atrevo a
decir: es el actual Oficial de las Fuerzas Armadas que más conocimientos tiene
con todo lo que tenga que ver con la Seguridad Social de los miembros de las
Fuerzas Armadas. Me pregunté: Por qué este Oficial no fue General. Por qué este
Oficial no fue Presidente del IPSFA?. La repuesta la tengo; pero se las dejo
para cada uno la interprete de acuerdo a su propio criterio, amigos lectores.
Ejemplos
como el de este valioso Oficial “ut supra” los hay y por montón, en
cada promoción de nuestra Alma Mater. Son muchas las supuestas excusas en
las que la “superioridad” de aquel entonces se escudaba para justificar el
"NO ASCENSO" al grado inmediato superior de “X” Oficial: por un
lado los fríos números que arrojaban las “calificaciones del servicio”; por
otro; que si las plazas vacantes; que si la prueba de aptitud física; que
si la Junta de Ascenso; en fin interminables ítem, aplicables solo a los que ya
se sabía que “no irían para el baile”,
Esta falta de visión de la
cúpula dirigente del Ejército y en general de las Fuerzas Armadas, conscientes
o no; la permeabilidad política en la institución y las apetencias personales,
etc.; debilitó e hizo vulnerable a la organización, pues esto
minó las bases fundamentales en que descansa toda organización armada y
que, taxativamente lo reza el Artículo N°2 del Reglamento de Castigos
Disciplinarios N° 6: “La obediencia, la
subordinación y la disciplina serán las bases fundamentales en que descansará
siempre la organización, unidad de mando, moralidad y empleo útil del Ejército”
Se dejó de un lado a Oficiales valiosos, especialistas, con amplios conocimientos en las diferentes áreas vitales e indispensables para el óptimo funcionamiento, en este caso, del Ejército, Los resultados hoy están a la vista. Esta no es mi culpa, si es suya está a tiempo, de hacer su “mea culpa”.
Puerto
Ordaz 24 de octubre del 2020
MILTON R. ABREU
A.
Coronel Ejército
Siglo XX
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